es lo que se suele decir hoy para quedar bien ¿no?,nunca he aceptado ser oradora de nada,sin embargo por razones sentimentales,amor amor a mis gentes y ami tierra si que he compartido con vosotros algunos momentos vividos en esta tierra generosa y bella,hoy no lo he dudado ni un solo instante y aquí estoy para volver a compartir con vosotros este hermoso oficio de pregonera de nuestras procesiones y proclamar a alos cuatro vientos nuestra vocación procesionista, recordemos esta nueva etapa que fue empezada ,de algun modo desde cero,donde todo el pueblo -unos mas ,otros menos todos se unieron al esfuerzo de los procesionistas,venciendo de este modo aquellas apatías y desganas a las que los portmaneros reconozcamos que siempre fuimos tan dados.Los resultados obtenidos aqui estan,creo que no es poco el hecho de haber conseguido que nuestras procesiones brillen con luz propia a la vez que conservamos esas viejas tradiciones,tan antiguas como nuestro pueblo.
Comienza la emoción al abrirse las puertas de este templo para dar paso a la cruz de guía,esa es la hora de recoger los frutos del esfuerzo de todo un año de trabajo.
La agrupación del Cristo,cuyos cofrades nos sorprende cada año con su orden y explendor al desfilar,dan paso al pesado madero en el que se inclina la imagen que tantas devociones arrastra a su paso.
Es emocionante verles caminar por calles y cuestas hasta llegar a la calle Mayor,donde los procesionistas se lucen a sus anchas.
La Dolorosa es bamboleada en su trono,en momentos nos mira complacida y guapa,y mas tarde se encuentra frente a su amado hijo,mientras su pueblo entona esa salve popular que todos aprendimos en la escuela.
Siempre he dicho lo importante que es no prescindir de los niños que vienen tomando parte en esta procesión,es verdad que ellos constituyen la mayor garantia de las procesiones que vendrán...los niños de la semana santa me recuerdan mucho a esos otros que hace años fabricaban tronos de cartón y cruces de caña,
mientras marcaban el paso al son del viejo tambor que hacia sonar Rafael Iglesias(EL PELELA),pues bien uno de esos niños era yo que con el paso del tiempo colabore y sigo colaborando con las procesiones de mi pueblo.
Y nada mas,sino daros las gracias por vuestra presencia en esta tarde tan grande para las cofradias,y pediros que tengais presente en vuestras oraciones a todos los hermanos cofrades que partieron para siempre.Que el Cristo del silencio os lo premie.
MªConchi Verdú Orubia
Arupacion S.Cristo del silencio.
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